Aunque parece que el verano se ha ido, parece que en unos días el calor volverá a apretar de nuevo.
Es fundamental en días de mucho calor estar bien hidratados. Además, es recomendable comer platos ligeros; fresquitos y de fácil digestión. Por tanto, vamos a huir de los guisos invernales y qué mejor que recurrir a las ensaladas y a las sopas o cremas vegetales. En cuanto a éstas, un claro ejemplo son los gazpachos, de los que ahora se hacen un montón de versiones. En mi caso, os presento un salmorejo, hecho a base de tomate, ajo, un poco de pan, aceite de oliva virgen extra y vinagre de vino. Lo he acompañado de un huevo cocido, y aquí está, un plato que, por la cantidad que he hecho comeremos al menos 4 ó 5 personas ;)
Y en cuanto a las ensaladas de verano, podemos hacer un plato único con muchos sabores, aromas, colores...Por ejemplo, yo he preparado esta ensalada de legumbre, garbanzos en concreto, con verduras y hortalizas; tomate, cebolleta, pimiento rojo y verde). A ello le he añadido proteína en forma de huevo cocido y atún en conserva y, finalmente, he troceado unas aceitunas negras. Por los alimentos que la conforman, esta ensalada es rica en proteínas de muy buena calidad, aportadas por los garbanzos, el atún y el huevo. Además contiene hidratos de carbono de absorción lenta, aportados por los garbanzos. Las verduras aportan agua, vitaminas y minerales, además de que el pimiento contiene vitamina C que ayuda a absorber el hierro que tienen los garbanzos. Por último las aceitunas negras aportan grasa de buena calidad, la cual será aún mejor si esto lo aliñamos con un buen aceite de oliva virgen extra.
Espero que os sirva de inspiración para planificar comidas y cenas saludables este verano :)
